Palabraras claves: resolución de conflictos
Dinámica:
Te explicamos una técnica para utilizar en momentos de violencia excesiva, está compuesta por dos etapas: la de calma y la de pensamiento. La técnica las sillas del pensamiento se puede aplicar en cualquier resolución de conflicto, pero especialmente en aquellas situaciones de mucha violencia.
La primer medida a realizar es separar a las partes involucradas con la mayor distancia posible para que se tranquilicen. No es “separar una pelea”, se trata intentar calmar a las personas para posteriormente avanzar en poder manifestar emociones y pensamientos.
Una vez calmados distanciadas las personas, se debe practicar la respiración interior profunda contando hasta diez.
Cuando se concluya con el ejercicio de respiración, se invita a las partes a sentarse en las sillas. Es importante que el mediador maneje la conversación permitiendo que cada uno exprese lo que le pasó y no se interrumpan.
Antes de comenzar a hablar se deben establecer pautas, por ejemplo: no hablar uno encima de otro, hablar de lo que uno siente y no de lo que el otro le hace sentir. También es importante que ante cada situación que relaten no manifiesten que la otra persona es la “culpable”.
Y lo más importante es que hablen sin intentar dañar a las otras personas y siempre buscando mejorar la relación. Es bueno hablar desde el razonamiento y también desde las sensaciones, la emoción.
Quien modere la conversación deberá guiar la charla y conceder la palabra por turnos a los integrantes.
